Bodega Otazu da por concluida su vendimia 2020, una etapa que dio comienzo a finales del mes de agosto y que ha finalizado a principios de noviembre. Con un viñedo teñido de un manto ocre, naranja, marrón y amarillo, la bodega con el viñedo D.O.P. Pago más septentrional de España finaliza la recolección de las uvas de sus parcelas, entre las que se encuentran variedades de Pinot Noir, Chardonnay, Tempranillo, Merlot, Cabernet Sauvignon y Cabernet Franc. La vendimia 2020 de Bodega Otazu dio comienzo a finales de agosto con la cosecha de uvas Pinot Noir —primera cosecha— y Chardonnay destinadas a vinos espumosos. Gracias a las suaves temperaturas de principios de septiembre y al ambiente seco, las condiciones sanitarias y de maduración de la uva Chardonnay fueron muy buenas a su entrada en bodega a mitades de septiembre. Así, el 2020 se consolida como un año excelente para la elaboración de vinos blancos de Bodega Otazu.
La vendimia de variedades tintas en Otazu suele ser prolongada en el tiempo. Respecto a la vendimia 2020, desde el equipo técnico de Bodega Otazu explican que “el tiempo fresco que vivimos durante el mes de octubre, salpicado por días de lluvias han permitido una maduración lenta y completa en las variedades tintas cuya vendimia se ha realizado escalonadamente hasta finales del mes de octubre”.
Las últimas parcelas vendimiadas de Bodega Otazu, recolectadas a principios de noviembre, han sido uvas de Merlot y Cabernet Sauvignon seleccionadas para ser microvinificadas y cuyo destino es la elaboración de ediciones limitadas de vinos. En este tipo de vinos se busca una mayor complejidad por lo que es esencial que la maduración se prolongue hasta conseguir la mayor expresión de las uvas. A su entrada en bodega la uva es seleccionada cuidadosamente en una doble mesa de selección y se microvinifica en barricas nuevas de roble francés. Son vinos con una maceración larga y que una vez descubados, continúan con una crianza prolongada en barrica.
El afán de Bodega Otazu por implementar en cada vendimia mejoras que propicien vinos únicos y con mayor personalidad, ha llevado a la bodega navarra a realizar las primeras microvinificaciones de uvas Cabernet Franc. A esta novedad se le une la elaboración de un clon de Tempranillo muy cualitativo que muestra notas muy destacadas. Además, la vendimia de 2020 está marcada por la elaboración por primera vez de un espumoso rosado de Pinot Noir. En estos momentos, el trabajo se ha desplazado a bodega y con los primeros vinos descubados, la vendimia 2020 de Bodega Otazu destaca, en líneas generales, por la obtención de unos vinos con carácter frutal y una frescura distinguida, arropados por finos taninos. En este sentido, Bodega Otazu considera que el 2020 puede ser una gran añada, dando continuidad a las añadas 2018 y 2019.